3 de mayo, 2018
Por Carmen Georgina Treviño González / Pueblo Bicicletero
“’¡No lo muevan!’… Estamos en Dr. Coss… atropellado…” se escuchaba en un audio desesperado el jueves pasado a las 11:42pm… En minutos se activó una gran red de personas que usamos la bicicleta en la ciudad. Habían atropellado a Jhonny, que conducía su bicicleta llevando a su pequeño niño en su silla especial. Los dos usaban su equipo de seguridad y transitaban con tranquilidad de vuelta a casa, después de rodar con sus amigos.
Y no ha faltado quien diga: “¿A quién se le ocurre andar en bicicleta, llevando a su hijo pequeño?” Pregunta que me llega a la entraña del coraje e impotencia. ¿Por qué culpabilizar a la víctima? ¿Es que ya nos olvidamos de las personas? ¿Es que no nos damos cuenta de la vulnerabilidad del que camina y se mueve en bicicleta cuando conducimos un vehículo? ¿Cuándo pusimos por encima a los autos que a las personas?
La bicicleta es una realidad en esta ciudad, se hacen diariamente más de 40,000 viajes usándola como medio de transporte. Aun así, percibo que aún somos los grandes invisibles para quienes se mueven en un vehículo automotor. El Reglamento Homologado de Tránsito del área metropolitana de Monterrey, reconoce la prioridad de los usuarios de la calle, poniendo en primer lugar al peatón, después al ciclista y hasta el final a los vehículos particulares y de carga (Artículo 2), pero esto aún está lejos de ejercerse en acciones concretas que permitan que sea una realidad.
Hoy, Víctor, de poco menos de 2 años, lamentablemente se ha convertido en el quinto homicidio de ciclistas en lo que va de 2018 en el área metropolitana de Monterrey (conteo que llevamos según las noticias locales y el más alto del que tenemos registro). Fue víctima de la velocidad de los autos, de la cultura vial de la prisa y de la falta de infraestructura y señalamientos adecuados para todos los usuarios de la calle. Al momento que escribo estas palabras, Jhonny lucha por su vida en estado crítico.
La invitación para quien lee estas líneas, es a reflexionar: ¿Dónde me ubico en esta realidad? ¿Respeto la prioridad cuando conduzco? ¿Qué cambios puedo hacer para mejorar mi cultura vial? Hay muchas pequeñas acciones personales que pueden ir haciendo a Monterrey y su área metropolitana una ciudad más humana e incluyente para todos los tipos de movilidad. No queremos seguir contando muertes ni sumando a las estadísticas más siniestros.
Víctor, descansa en paz. Jhonny, no dejes de luchar, te queremos rodando de vuelta con nosotros.
e-mail: carmengina@pueblobicicletero.org
web: www.pueblobicicletero.org
Columna editorial publicada en el portal de Dominio Radio el 3 de mayo de 2018.
