Ayer estuvimos en la esquina de Arteaga y Álvaro Obregón, en 64000MTY para colocar otra bici blanca (van cinco en poco más de un mes) en memoria de Felipe del Rivero, 33 años. Asesinado el domingo antepasado por la noche. Ahí estaba su familia. Juntos. Gracias a unas playeras que mandaron a hacer con la foto de Felipe, pude verle la mirada. Lo que me decía su hermana mayor de él lo confirmaba viéndolo mirarme. Una persona con esa actitud que tanto admiramos, mucha dignidad e independencia. De esas personas libres y amorosas. Todo esto lo supe por el testimonio de ella, de su cuñado y de su papá, quien me contó que trabajaban juntos, que tenían planes… y luego sólo decía, mi niño, mi niño. Ahí me partí.
Cuando los familiares tomaron el altavoz nos dieron un mensaje contundente. Gritaron al unísono: ¡Justicia, justicia! Y es que imaginen esto. Muere arrollado por un camión tu hermano, tu hijo, tu amigo… su cuerpo es proyectado más de diez metros. La ambulancia llega 25 minutos después. Muere llegando al hospital. Su cuerpo lo llevan al SEMEFO. Es domingo casi de madrugada. Les dicen a los familiares que se los entregan a las 7 de la mañana. Ahí se quedan. Pero no. Ni el lunes, ni el martes, sino el miércoles por la mañana… ¿imaginan la desesperación? Luego, al acudir a conocer el parte del siniestro se enteran de que toda la culpa fue de Felipe. Así quedó asentado por los peritos. Y no sólo eso, sino que el camión de la ruta 225 iba a 40 km/h. ¡Una burla! ¡Una humillación para la memoria de Felipe! Una de sus hermanas en el altavoz gritaba, ¡él ya no está aquí para defenderse, para luchar, nosotros sí! Y nosotros también.
Quienes hemos transitado por Arteaga sabemos que esa calle está tomada por la impunidad de los conductores de camiones. Van como proyectiles. Peor aún de noche, cuando el centro se pone como boca del lobo. ¿Que iba a 40 km/h? Imaginen que este parte queda como “la verdad oficial”: tu amigo tuvo toda la culpa, es más: se suicidó. Vio a un camión que venía lento, bien alumbrado, y decidió avanzar. ¿Cómo pueden los deudos descansar con esta humillación encima? Lo mismo le pasó a Johnny. A los peatones y ciclistas que son asesinados los peritos les echan la culpa. “Se arreglaron”, me dice el cuñado de Felipe.
¿Quién mató a Felipe? Lo mató un conductor cuyo nombre desconocemos. Pero también lo mató la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad de Monterrey, en concreto su Comisario General: Eduardo Sánchez Quiroz, quien no están previniendo estas tragedias. Por el contrario, él y su equipo han claudicado, han abandonado sus funciones. Es de sospecharse que les sale más redituable la economía que se mueve en los choques, aunque se desgarren familias enteras. A Felipe lo mató también el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, quien presume su calle “completa” en Avenida Juárez en donde olvidó, una vez más, a los ciclistas de la Ciudad. El Alcalde sigue atorado en los autos –corrección: en camionetas blindadas. No ha habido una sola política ni siquiera que fracase, ya no digamos exitosa, que haya liderado De la Garza con la intención de parar esta violencia vial que nos asesina.
¿Topes, vibradores con luces? ¿Cámaras para multar el exceso de velocidad? ¡Algo, carajo! ¡Salva vidas, Adrián! Comisario Sánchez Quiroz, revise este caso. Ordene una investigación en serio. No tiene lógica pensar que un hombre de 33 años atentó contra su vida. Por la calle Arteaga transitan camiones ¡sin luces! Dele un giro a esta historia de impunidad sistemática. No nos miente más la madre con croquis absurdos.
Empatía, amigas y amigos. Ayer el Colectivo Pueblo Bicicletero colocó la Bici Blanca en el poste en donde cayó herido Felipe del Rivero con un pendón que decía EMPATÍA. Este Colectivo está sosteniendo un enorme peso sobre sus hombros y no dejan de pedalear. Ayer sus integrantes vivieron este acto con profundo dolor y rabia. Sostengamos junto a ellos y ellas esta lucha.
Les dejo una tarea sencilla:
Escriban un tuit a @AdrianDeLaGarza y otro a @spvmty exigiendo justicia para Felipe del Rivero y preguntando por acciones concretas que mejoren la convivencia vial en nuestras calles.
Escribe a la Presidenta de la Comisión de Transporte del Congreso Local, Julia Espinosa de los Monteros: juliaespinosa@hcnl.gob.mx exigiendo que la Ley de Movilidad detone nuevos acuerdos de convivencia vial y que en el nuevo presupuesto quede bien etiquetado el financiamiento para la ejecución del BiciPLAN.
Si hubieras sido tú, o tu hermano, o tu hija, esperarías al menos esto de nosotros.
Las imágenes son de Cecilia Casas, integrante de Pueblo Bicicletero.
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