El martes 10 de noviembre se llevó a cabo una reunión en el piso 27 de la Torre Administrativa en la que participaron el subsecretario de Desarrollo Urbano y personal de la Secretaría de Desarrollo Sustentable, la directora y técnicos del Consejo Estatal de Transporte y Vialidad, así como representantes de Banobras, SEDATU, el Banco Mundial, empresas consultoras y sociedad civil.
El objetivo de la reunión fue un seguimiento a la donación de recursos provenientes del Banco Mundial que el Gobierno del Estado de Nuevo León utilizó para la realización de tres proyectos:
1) Plan maestro de ciclovías en el Área Metropolitana de Monterrey; incluyendo los proyectos de las ciclopistas alimentadoras y difusoras del BRT Lincoln-Ruiz Cortines. (BICIPLAN para el Área Metropolitana de Monterrey);
2) Estudio de Accesibilidad Universal e Incentivos al movimiento peatonal en el Centro de Monterrey;
3) Estructuración técnica, legal y financiera del corredor de movilidad sustentable Constitución-Morones Prieto
Las instituciones internacionales y dependencias nacionales que participaron en la gestión de estos recursos asistieron a la ciudad para revisar la implementación y cierre de la donación GEF-STAQ para el «Proyecto de Transporte Sustentable y Calidad del Aire». En la reunión también se buscó indentificar las necesidades de posible financiamiento para la implentación de dichos proyectos.
Primero se llevó a cabo la presentación del Plan de Movilidad en Bicicleta para el Área Metropolitana de Monterrey (BICIPLAN)
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Después se presentó el Estudio de Accesibilidad Univesal e Incentivos al Movimiento Peatonal en el Centro de Monterrey.
Y finalmente presentaron el proyecto de la Estructuración técnica, legal y financiera del corredor de movilidad sustentable Constitución-Morones Prieto
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¿Qué sigue?
El problema es el dinero, dice el gobierno del Estado. No hay recursos a nivel estatal y municipal. Pero la pregunta es ¿qué tan eficiente y democrático es el uso de los recursos públicos destinados a desarrollo urbano y movilidad? Sabemos que existe una tendencia de décadas en las que el dinero de las y los contribuyentes termina siendo utilizado en obras diseñadas exclusivamente para el automóvil.
Un área de oportunidad es el uso de los recursos federales del Fondo Metropolitano (FM). Dichos recursos para 2016 son 800 millones de pesos, según quedó establecido en el Presupuesto de Egresos de la Federación para dicho año. Según las reglas de operación que estipula la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ese dinero público debe ser destinado para proyectos sostenibles de desarrollo urbano y movilidad. Para la asignación de esos recursos el Estado y Municipios debe presentar proyectos que demuestren el costo-beneficio y que tengan un beneficio para el área metropolitana. Los puentes vehículares o pasos a desnivel son obras donde los Municipios han malgastado los recursos del FM en los últimos años.
Exigiremos al gobierno de Jaime Rodríguez Calderón que instale el Consejo Metropolitano para la Zona Metropolitana de Monterrey con la participación de la sociedad civil, y que sea a través de esta plataforma que se asignen los recursos sólo a proyectos que cumplan con las reglas de la SHCP. El BICIPLAN es uno de estos proyectos que deberían ser financiados con recursos del Fondo Metropolitano. Por ejemplo, la Zona Metropolitana de Guadalajara destinó un 30% de los recursos del FM en 2015 para proyectos de movilidad no motorizada. Es tiempo de cambiar las reglas y hacer un ejercicio democrático de los recursos públicos.
