El debate más sonado en el mundo del ciclismo urbano es sobre el uso del casco. Artículos van y vienen sobre la relevancia de su uso. Pero no hay que equivocar el debate.
Como colectivo promovemos el uso del casco a las personas que participan en nuestra pedaleadas domingueras y su uso es obligatorio para los menores de edad que nos acompañan. Invitamos a la gente a considerar usarlo en sus traslados diarios. Sin embargo, la postura varía en cuanto.
Así lo refleja el informe Cycle helmets: Summary of the evidence, realizado por The National Cycling Charity (CTC), del Reino Unido, el cual se exponen las razones, respaldadas en pruebas concluyentes, para que el uso del casco no sea obligatorio por ley ni sea objeto de campañas promocionales.
En el reporte publicado en abril de 2012, la CTC no trata de ser «anti-casco» ni toma partido sobre si es o no una buena idea para los ciclistas utilizarlo como decisión personal. Lo que esta organización británica destaca es que existen pruebas fehacientes de que las leyes que obligan el uso del casco dan lugar a una pérdida importante de la salud y así como de otros beneficios del ciclismo, sin los beneficios compensatorios de la seguridad para los ciclistas que las justifiquen. Existen formas mejores para aumentar la seguridad de los
ciclistas.
La traducción al castellano fue realizada por las organizaciones españolas Coordinadora en Defensa de la Bici (ConBici) y Valencia en Bici
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